viernes, 11 de noviembre de 2016

MARIANO Y SUS RUBIAS

! Extremeño ! ! Si , Mariano era extremeño….!! y estaba orgulloso de ello. Pese su aspecto, uno lo podía situar geográficamente en aquella deprimida región de España con solo oírle decir un par de palabras… Pero el maldito ADN, ese acido nucleíco traidor del que están hechos los genes y que contrariamente a lo que la gente cree puede permanecer generaciones oculto para resurgir como un rio Guadiana en un momento y en un lugar inoportuno, le había jugado una mala pasada.

Vamos a ver…Si todos los de aquel perdido pueblo, eran morenos, enjutos, delgados y de corta estatura…,si todos tenían el agitanamiento que da la mezcla ancestral de lo ibero con lo moro…, si sus padres eran igual que los demás….si sus hermanos eran indistinguibles del resto de la chavalería del pueblo. ¿ Por qué?....¿ Por qué coño había nacido con aspecto de Alemán? : Ese rubio de Hamburgo…. Esa piel rosada de Dresde… Ese cuerpo macizo y barrigón de Baviera… Y esa estatura que hacía que los vecinos de la calle tuvieran que mirar hacia arriba para verle los ojos azules… 

Desde pequeño ya, Mariano, había tenido que sufrir las chanzas de la chavalería que le trato como un gorila albino, hasta que al crecer su envergadura comenzó a intimidarles con su aspecto genuinamente nazi.

Como en la casa no había posibles, para poder vivir, Mariano en su juventud tuvo que dedicarse en su pueblo a las tareas más pesadas de las que los demás huían y que él, hacía con increíble soltura. Levantaba los carros del fango…, Herraba los caballos…, Arreglaba la 
pesada maquinaria agrícola  y sin su concurso, ni diez mozos podían mover las redondas muelas de granito del molino. En las fiestas, a Mariano siempre le tocaba portar la pesada cruz de la procesión de Semana Santa…,salir de Sansón en los teatrillos de las fiestas,!Ah! y de noche..., sujetar al toro embolado en el pilón de piedra para que le pudieran encender las antorchas en sus cuernos y correr por las callejas como una aparición intentando cornear a los mozos.

A Mariano, había que verlo cuando con su sombrero de paja se sentaba a solazarse con los amigos en pantalón corto de trabajo...Parecía más un tirolés a punto de cantar el famoso " alaiiirooooliiiilooo " buscando el eco de las verdes montañas alpinas que un carpetovetónico al uso.

!No! ,!No bebía cerveza!, hubiera sido demasiado para su estampa…él solo vino tinto y aguardiente de orujo de la tierra. Como para todos los demás por entonces, las bebidas modernas con burbujas, eran una mariconada extranjera.

Pero llegó el momento en que la sequía y la hambruna, llevó a la mitad de los jóvenes del pueblo a emigrar a Alemania donde la reconstrucción industrial tras la bárbara guerra, pedía mano de obra barata y poco cualificada..Pero para Mariano 
además, había otra razón para emigrar que era mas de tipo personal  … Mariano era virgen, no se comía una rosca en el terreno sexual  y eso lo tenía jodido porque con sus hormonas a tope, andaba siempre caliente y los amigos se reían de él.

No es 
que el joven Mariano  fuera feo, aunque es verdad que resultaba exótico y extravagante… , lo que ocurría esque las muchachas de la localidad, poco experimentadas y mas bien pequeñas de tamaño, tenían autentico pavor a su enormidad cuando pensaban en  "continentes" y "contenidos" y ninguna de ellas quiso jamás ir con él a la era tras las matas en la romería de San Juan, cuando el mujerío andaba más o menos receptivo en busca de emparejarse y los padres relajando la vigilancia, miraban hacia otro lado haciéndose los tontos. 

Aquello de la emigración, 
aunque forzada por las circunstancias para Mariano fue paradójicamente una suerte inesperada. Alemania para aquel muchacho supuso el cielo…,el paraíso…, la tierra de promisión ! !vamos !. Deambulaba por las empedradas calles de Dormund sorprendido de que nadie le mirara, la gente le sonreía, las chicas coquetas se le dirigían en alemán con cualquier excusa,e incluso aprendió la endiablada lengua con una facilidad pasmosa llevada en algún gen visigodo y la buena colaboración de alguna teutona ardiente que le hizo de profesora particular, porque en lo tocante a la cama…, Mariano era una maravilla para las macizas Germanas,!era un autentico chollo!,!una combinación explosiva! , ! aspecto Alemán y fogosidad española ! ...Así que efectivamente… en Alemania, el patito feo de Manolo..!! Resultó ser un cisne !!

Todo fue como en los cuentos y ayudado por su imagen, su fortaleza y las habilidades mecánicas que había desarrollado en el pueblo, ascendió rápidamente en la industria del automóvil hasta alcanzar posiciones vetadas para los no autóctonos al tiempo que se pulía en lo cultural y lo intelectual.

Pero….a Mariano..., le faltaba algo para fundirse entre aquellas gentes y solo completó su integración en aquel frio país, cuando conoció a "la rubia". ¿ Una alemana? !! Si, una alemana!!, ¿ Rubia..? !!Si, rubia !... !! La Cerveza !!... Aquella bebida que le daba asco en su tierra se convirtió en su maná, y se pasaba el día esperando que después del trabajo en la Mercedes Benz le pusieran en la confortable cervecería tirolesa, un enorme tanque rebosante de espuma que de un trago reducía a la mitad!....!! Ahora sí que estaba integrado !!

Pero Amigos…todo tiene un pero…a pesar de que con el tiempo se había casado con una autentica Valquiria grandona de las de ópera de Wagner con el pelo dorado, entrada en carnes y  con unas 
enormes tetas, sus hijos nacieron enjutos, morenos, agitanados y delgados como si hubieran nacido en su pueblo extremeño.

Parecía como si aquella Valquiria no hubiera puesto nada más que su vientre en aquel tema… y al crecer los morenos chavales, empezaron a ser vistos con desagrado por una sociedad en la que el sentimiento ario de pureza racial había calado y tras las derrotas de la guerra permanecía latente bajo una capa de condescendiente igualitarismo legal impuesto mas o menos políticamente.

Al fin, cuando comprendieron, que los muchachos se sentían incómodamente extranjeros en su propia nación y se les iba cerrando el futuro, Mariano, a su pesar, decidió regresar con su familia a España al pueblo paterno de Extremadura donde sus hijos se encontraban como pez en el agua siempre que iban de vacaciones.

¿Y ellos? ! Me refiero a los padres…! ¿ Se adaptaron al pueblucho?.

Bueno… ,ellos…, tu sabes que los padres nos adaptamos a todo por el amor a sus hijos y Mariano y la Valquiria que no eran una excepción se adaptaron como pudieron… aunque creo que bastante bien…La cerveza ya se había puesto de moda en España, la Alemana cocinaba bien y con lo que pudieron traer de la venta de sus propiedades montaron una modesta cervecería alemana en la plaza de la iglesia cuyo enorme éxito entre los paletos de la España desarrollista hacía que cambiaron el vino tinto, la paellas y potajes por ingentes cantidades de cerveza espumosa que trasegaban en enormes jarras de cristal acompañadas de Chucrut y desvergonzadas salchichas ahumadas de un tamaño obscenamente fálico.

¿Echar de menos Alemania.. ? !! Claro que la echaban de menos!!... !! Allí fueron tan felices… !!.¿Pero sabes?... todas las noches, como fantasmas obesos, volvían allí con el espíritu….y cuando bajaban la persiana de la puerta del establecimiento, se sentaban en la barra fuera del mostrador frente al grifo helado de la cerveza y entre risas y bromas hablaban en alemán y bebían una jarra tras otra como si la vida les fuera en ello y no hubiera un mañana…Luego, volvían a casa silenciosamente por los empinados y desérticos callejones encalados dando tumbos de pared a pared si soltarse el uno del otro…

!! Si !!, Mariano había decidido retornar a España y hubiera hecho lo que fuera por sus hijos, pero… !! No pensaba soltar sus amores y no se separaría jamás de ninguna de sus dos rubias si no era para comprar el último billete…!!