viernes, 29 de abril de 2016

DENDROFILIA


De la historia de Blás me enteré por un cotilleo en una sobremesa donde un Psiquiatra medio achispado comenzó a contarnos historias sobre las rarezas y las desviaciones que en sus conductas sexuales tiene el ser humano. Explotando hábilmente nuestra curiosidad y morbo, el muy cabrón se hizo el amo de la tertulia y en medio de las exclamaciones de escándalo de las mujeres que reían haciéndose las avergonzadas, se erigió en el protagonista de la jornada. En mi condición de contable que se pasa la vida frente a un ordenador, Yo tenía poco que aportar y permanecía callado y un poco resentido durante toda la tertulia al no poder contribuir en algo a aquella deliciosa tarde en el jardín.



Había oído hablar de casi todo lo que aquel doctor "gilipolla" contaba con cara de estar de vuelta de todo, fuera de contexto y con una total falta de empatía para los que habían sido sus pacientes y le habían depositado su confianza. El "Pavo", hay que reconocer, tenía su gracia y aliñaba la cosa con sarcasmos e ironías incluso chanzas, olvidando en todo momento que estaba hablando de personas que están enfermas, que sufren y hacen sufrir.

Si no hubiese sido porque me había invitado mi mejor amigo, me hubiera levantado de la silla, lo hubiera avergonzado y hubiera hecho un dramático mutis por el foro. Pero...! Estaba atrapado por las circunstancias!. Opté pues por "desconectar" y ya me estaba aburriendo cuando al oír aquella bella palabra cuyo significado desconocía, levanté las orejas de inmediato como un perro de caza…!! Dendrofilia ¡¡

Cuando llegué a casa, también iba medio borracho, todas las ganas que tenía de estampar contra la pared a aquel "Tonto del haba" las había ido mitigando chupito a chupito de orujo del fuerte, pero aún pude irme al diccionario para ver de qué se trataba aquel "palabrejo".

Dendrofilia : La dendrophilia es una parafilia sexual que describe la atracción sexual hacia los árboles y las plantas, incluyendo su uso como objetos sexuales. ...

Pese mi lamentable estado, enseguida me di cuenta de que aquello era una autentica "Mierda" de definición que habría pergeñado algún académico de la lengua sin ni puta idea de lo que iba el asunto. !No se puede etiquetar de Dendrófila a una pobre viuda que usa una banana para recordar a su difunto marido y mezclarla con la mujer madura que, desnuda, solo alcanza el éxtasis follándose lascivamente a horcajadas el tronco de una higuera! como no se puede etiquetar de anormal a un pobre pastor que perdido en el páramo "se trinca" a la oveja más atractiva acordándose su novia, tras dos meses de solitaria trashumancia!.

Pero el caso de Blas, del que habían hablado aquella tarde, no estaba tan claro….Blas, hacía honor a su nombre ( del griego Cojo) porque además de feo como un pecado, analfabeto e ignorante este joven, casi un adolescente, cojeaba ostensiblemente de la pierna izquierda desde su nacimiento y era "mas bruto que un arao". Blas vivía con su madre viuda en una pequeña aldea de cuatro casas, cuyos habitantes se mantenían del cultivo de media docena de huertecillas que se alimentaban de un pequeño arroyo en medio del enorme y desértico secarral que era aquella aislada meseta.

Y…. !Si!, el párroco "Descubrió el pastel "… lo sorprendió jodiendo con una enorme y tibia sandía a la que había realizado un pequeño orificio con su navaja para poder introducir aquello que se le levantaba indisciplinadamente desde que le había salido barba y comenzaron a olerle los pies. Pero lo peor…, lo peor es que lo hacía en el mismo huerto sin arrancar el fruto, y luego cerraba la grieta cuidadosamente con su semen dentro, para que pudiera cicatrizar y enviarla junto a las demás a los mercados de la capital. Dijeron que lo hacía para que alguna consumidora incauta recibiera sin saberlo su masculino mensaje, pero yo creo a Blás no le alcanzaba para tan refinada maldad y su intención solo era que por su culpa, no se perdiera la venta de un solo fruto..

!Si!...., el escándalo que se organizó fue de órdago. El curilla descubridor, aun novato e intransigente, quiso ver en ello al diablo y quiso por tanto exorcizar a Blas, pero con el exorcizador... vino la prensa… y las fotos…la televisión local y tras ellos, los neurólogos y alienistas…Es entonces cuando salió a relucir la palbrita…!Dendrofilia !. El pobre Blas se libró de milagro de que lo internaran en un frenopático y al fin… como todas las cosas , incluso las más delirantes, al cabo de unas pocas semanas, el pobre Blas y sus profanadas sandías, dejaron de ser noticia y la aldea y sus habitantes, cayeron de nuevo en el olvido.

Fue entonces, y solo entonces, cuando… !!Lo que es la astucia femenina!!, Lola que había permanecido agazapada como una leona durante la tormenta mediática pensó, que le había llegado la oportunidad de cazar al único ejemplar macho y joven en varias leguas a la redonda. Además de ser más virgen que la propia Virgen, Lola era bajita y gruesa pero también consciente que allí no se podía vivir sin un hombre. Así que encargó el tinte verde oscuro adecuado con el que tiño sus enormes bragas de algodón y se puso como le había dicho su abuela, a las dos semanas de su última menstruación, arrodillada a lavar ropa a la vera del rio en el preciso lugar donde el sendero se acercaba mas a la orilla.

Cuando Lola de reojo, vio que Blas venía por la trocha, se arremangó descuidadamente la falda mostrando su enorme pandero que con la posición adoptada lucía como una magnífica sandía y comenzó a frotar con violencia la ropa enjabonada sobre la tabla de lavar haciendo un montón de espuma…

! Blas no la violó!. Se le acercó por atrás fascinado y como un hipnotizado, acarició suavemente la redondez de aquel culazo y solo cuando ella sin moverse volvió la cabeza con una sonrisa pícara, la tomó apresuradamente en completo silencio desgarrando con su virilidad el sobado algodón verde sandía. Pero ésta vez….., ésta vez el mensaje de Blas, si que llegó a su destino...

Tras la apresurada boda, con Lola ya preñada de lo que para mí podría llegar a ser un dislate genético, ambos se fueron de modesto viaje nupcial a la capital de la provincia donde se dedicaron a pasear con cara de tontos cogidos del brazo mirándolo todo. Así lo hacían aquella tarde del último día antes de regresar al pueblo, cuando en un momento dado, Lola se paró inesperadamente, encaró a Blas y le dijo con seriedad : ! Oye Blas! ! No te lo volveré a decir! … ! Mira a las mujeres todo lo que quieras!…pero te lo advierto… como te vea mirar una sandía…….! te reviento los morros !



lunes, 25 de abril de 2016

EL NIÑO ROSAURO.

!Joderrrrr…….! ! Rosauro...! !Mira que ponerle Rosauro...! Aquel hombre musitó entre dientes mirando encorajinado al niño que sentadito en la alfombra, junto a la alacena, jugaba con una muñeca rubia de cara de porcelana y cuerpecito de trapo que había heredado de su hermana mayor y a la que la estaba vistiendo con esmero y delicadeza con un trajecito de finas puntillas apropiado para tomar el té en una ficticia merienda con aquellas minúsculas y cursis tacitas amarillas de plástico del juego de café de juguete.… En su desilusión, Luis no se preguntó entonces a quién se le había ocurrido aquel nombre porque sabía la respuesta.


Para colmo, la ventana abierta al amplio y sombreado patio porticado del viejo edificio, permitía el paso de los agudos gritos de guerra del chavalerío del barrio, que incluyendo al hermano menor de Rosauro jugaban en él a lo bruto, divididos en dos irreconciliables bandos definidos espontáneamente por sus preferencias futbolísticas y que les llevaba a pegarse entre risas fuertes balonazos en un juego de lo más bestia, cuyo final en lloros o descalabros era mas que previsible.

Ni buscando varios días por todo el santoral, alguien podría haber dado con un nombre mas adecuado para aquel chaval. Luis llegó a pensar que aquel nombre había sido un aviso de Dios para que se preparara para lo que le había tocado en suerte y que hasta aquel momento, a pesar de los múltiples indicios recibidos se había negado a aceptar - !No hay peor ciego que el que no quiere ver!- susurró Luis con una amarga sonrisa de resignación .

!Pero no!... La verdad era que al niño que ahora rondaría por los seis o siete años no le pusieron Rosauro por ninguna premonición…!No!, El dichoso nombrecito les había venido de impuesto de algún modo y  Luis se sintió entonces un poco culpable de haber cedido al chantaje . Don Rosauro, el solterón y acomodado tío-abuelo de su mujer que a falta de hijos frecuentemente les ayudaba económicamente , les había dejado caer en su momento muy disimuladamente, que permitirle ser el padrino del recién nacido y bautizarle con su nombre - Rosauro- podría darle una excusa para ser todavía mas generoso con esa familia, e incluso tal vez incluir al infante de algún modo en su testamento.

Aunque lo intentaba, a aquél padre no se podía quitar de la cabeza la irracional sensación de que con el dichoso nombre, Don Rosauro , al sostener al niño frente aquella pila bautismal de mármol blanco, había trasmitido de algún misterioso modo su personalidad y sus inclinaciones a aquel bultito arropado que berreaba cuando la helada agua bendita caía desde la concha de plata hasta su cabeza pelona. Porque…puestos ya a que se le hubiera caído la venda de los ojos, de repente, el hombre percibió entonces lo que nunca había ni siquiera sospechado y comenzó a comprender porque aquel hombre atildado, educado, presumido, culto, francamente guapo y bien plantado jamás se casó ni se le conocieron novias. También entendió porqué Don Rosauro desaparecía semanas en la Riviera francesa y porque, en el circulo literario del ateneo siempre se le veía acompañado de jóvenes pintores, poetas y escritores con el respetable disfraz del mecenazgo. Se le hizo claro como el día, como en sus últimos años, cuando la vejez le llevó a la amarga soledad encerrado cruelmente en un armario del que los tiempos que corrían no le permitían salir, el extravagante y acomodado tío de su mujer, se había acercado a ellos -su lejana familia- buscando un poco de calor humano.


Han pasado ya algunos años desde aquel día amargo en el hombre comenzó a comprender y aceptar la condición de su hijo y hoy, el niño Rosauro le acompaña por la calle vestido extrañamente de rosa con su sombrerito y sus francesitas a juego y con el brillo de la alegría en sus ojos infantiles riendo de excitación. La mañana del sábado está preciosa y van a la matinal de la escuela de ballet donde Rosaurin, como le gusta que le llamen, actuará en el festival de primavera y donde por méritos propios será el primer bailarín. Su padre, camina a su lado y solo tiene ojos para él y sus delicados movimientos y lleno de amor y orgullo, ignora a algunas gentes y familias que les miran con disimulo cuando se cruzan con ellos a la salida de la misa. Ese niño, contra pronóstico, solo le da motivos de alegría y endulza su vida y él solo desea que sea dichoso sin trabas y no quiere que ese niño de su corazón se meta en un armario del que luego tenga que salir dolorosamente. No...No fue plato de gusto cuando supo como era Rosaurin. Pero el amor de un padre puede con todo y…ya sabes amigo…en esta vida, si no puedes cambiar los hechos….el desafío está en cambiarse uno mismo...

viernes, 15 de abril de 2016

EL CARRUAJE

El olor a sudor de hombres y caballos entraba por las ventanillas del carruaje que corría veloz por aquellos terribles caminos perdidos en la oscuridad de noche centroeuropea. 

La Luna, apenas una fina tajada de melón apenas era visible entre los arboles del negro y tenebroso bosque. 

Un jinete se había apostado en el primer caballo del tiro y lo hacía cabalgar al trote. El cochero atrás en lo alto, sostenía las riendas y aguantaba con el rostro impasible los terribles vaivenes del carruaje al saltar por las piedras y los profundos baches mientras su látigo restallaba sobre los lomos de las bestias que iban a galope sin un solo quejido, hundiendo sus cascos en las enfangadas rodadas.


La archiduquesa, viajaba sola. La cita era en Viena a primera hora de la mañana. El emperador definiría su destino en un matrimonio de conveniencia para el imperio como lo había sido para el resto de mujeres de su familia. Su alta peluca acaracolada y rubia se bamboleaba casi rozando el techo del vehículo y su boquita roja perdida en su rostro blanco de polvos de arroz, parecía diminuta como la de una muñeca de porcelana. Las esmeraldas de sus largos pendientes de oro golpeaban su cuello de gacela alternativamente y sus pechos desvergonzadamente expuestos por la moda en el enorme escote, se movían como flanes amenazando escaparse en cada bache.

Prima de María Antonieta reina de Francia, a sus diez y nueve años, Doña Margarita era consciente de ser la mujer mas bella, inalcanzable y deseada de la casa de Habsburgo. Era tan virgen como cuando nació y sabía que su porvenir no lo marcaría el amor sino la política.

Cuando las puntillas de su escote comenzaron con el traqueteo a rozar los pezones de sus pechos comenzó a notar la excitación en su bajo vientre que fue subiendo hacia sus mejillas arrebolándolas.


La imagen de Amadeus Wolfrang se fue abriendo paso en sus pensamientos. Ese guapo musiquillo de la corte de Francisco José cuya música, que escuchó en Salzburgo tiempo atrás la excitaba y la ponía tan caliente y con quien había comenzado a mantener un secreto juego tácito que le fascinaba. Cuando notó que su sexo ya estaba completamente mojado arremangó con un marcado fru-fru los aros de su miriñaque, sus cinco enaguas de volantes y sus faldas de raso dorado hasta casi taparse el rostro, y abrió obscenamente sus piernas que a la luz de la luna que entraba por la ventanilla brillaron blancas por las medias color marfil que llevaba hasta los muslos y las apoyó flexionadas en el asiento delantero. Había prescindido premeditadamente de ponerse sus bragas bombachas y notó la brisa de la noche en su sexo desnudo con un pequeño escalofrío. Sintió que goteaba hacia abajo y a ciegas llevó su mano enjoyada hasta su hendidura, posó suavemente su dedo índice sobre su clítoris y con una orden desmayada, ordenó al cochero bajar la cuesta hasta Viena al trote máximo. Los movimientos del carruaje hicieron el resto bamboleando sus caderas bajo su blanca mano que reposaba desmadejada en los rubios rizos de su pubis. Mientras, entre jadeos, su pequeña lengua salía lascivamente de su boquita relamiendo con su punta curvada las finas gotitas de sudor que se habían generado en su labio superior. Su cabeza echada hacia atrás con los ojos cerrados y su barbilla en alto oscilaban cómicamente con peligro de hacer caer su peluca.

Fue al final de la bajada de la cuesta, con las primeras luces, cuando llegó al éxtasis con un pequeño gritito. Tras abrir los ojos desmesuradamente, los cerró de golpe derrumbándose en su asiento. Luego bañó toda la manita izquierda con el néctar que había fluido generosamente de su flor y sonrió inocentemente como si nunca hubiese roto un plato.

Cuando bajó de la diligencia frente a palacio real, su figura era tan estirada y digna y estaba tan perfectamente compuesta que nadie hubiera sospechado el reciente episodio. Margarita estaba inmaculada. Mientras se apeaba ayudada por los lacayos buscó disimuladamente la mirada de Amadeus que rodeado de otros cortesanos la estaba esperando para acompañarla frente al Emperador.

Margarita, en el besamanos protocolario solo a Mozart le ofreció la mano izquierda disimuladamente en vez de la derecha para ser besada. Cuando el músico en una perfecta reverencia puso su boca en el guante calado, la apretó hasta dejarse los labios marcados por la puntilla y cerró los ojos demorándose largamente aspirando su intimo aroma. La condesa, ni pestañeó, ni siquiera se permitió una sonrisa cuando al alzar el músico su blanca peluca de su mano, observó que la estrechez de sus calzones de seda del maestro marcaba un enorme y escandaloso bulto alargado entre las piernas.

Amadeus algo azorado, se separó con disimulo de la comitiva y mirándose la entrepierna sonrió pensando divertidamente en la flauta mágica, su opera favorita…Luego, con paso apresurado se dirigió a su estudio.

! No! , ! No se aliviaría aun!, luego engancharía a la criada eslava encima de la mesa cuando le trajera el almuerzo, sin mirar siquiera en por orificio la tomaría… pero ahora…. !No!, ahora necesitaba toda la fuerza animal que aquel olor almizclado le había hecho sentir para componer aquel final. Con su pluma de ganso se lanzó sobre las partituras y rasgó sin interrupción y sin una sola corrección en los pentagramas un crescendo terrible plagado de tubas, trompas ,timbales y sopranos que tras alcanzar la máxima intensidad acababa tan bruscamente como lo hace el placer carnal…

Solo llevaban dos meses casados cuando
, en el palco, al final de la obra de Wolfrang Amadeus Mozart,  Alberto el Elector de Sajonia se quedó sorprendido de la fina sensibilidad de su joven esposa Margarita que había escuchado los últimos compases con los ojos fuertemente cerrados crispando las manitas en los reposabrazos del sillón de madera dorada y ahora en vez de levantarse y aplaudir, se había quedado extasiada en su asiento. 

Ella por fin pudo reunir algunas fuerzas para mirar a su esposo y con el sexo bajo sus faldones chorreando secretamente, de nuevo puso cara de no haber roto un plato y le sonrió inocentemente suspirando en tono de disculpa.

viernes, 8 de abril de 2016

LA SOMBRA DEL PERRO

La mañana de primavera era espectacular. Como tantos otros días Antonio había llevado a su perra a pasear por los muelles del puerto aún desierto. Desde que había enviudado después de toda una vida de matrimonio, aún no sabía salir solo de casa. El dolor había pasado y el duelo estaba hecho, pero la necesidad de compartir cada actividad para poderla disfrutar persistía tercamente. 

Mayor ya, sin habilidades sociales y desfasado como solo puede estarlo quien no había necesitado relacionarse socialmente demasiado, a Antonio, se le antojaba casi imposible encontrar a alguien con quien pudiera solamente romper el silencio y oír resonar su propia voz.


Es curioso como en los largos matrimonios, incluso en los más felices, los hombres y mujeres se van quedando sin darse cuenta anclados emocionalmente en tiempos e ideas pasadas, a fuerza de no necesitar adaptarse y evolucionar, mientras las relaciones cambian en la sociedad a un ritmo vertiginoso.

Por eso y solo por eso, superando la aversión que le producían los animales, Antonio se hizo con " Gafas" , una joven perrita desrazada abandonada en un refugio canino tan necesitada de compañía como él.

Gafas, salía con Antonio a caminar aliviándole un poco la sensación de soledad. El viudo hablaba con la perrilla, y se obligaba a salir de casa para que caminara e hiciera sus cosas. Pero no era suficiente; En el fondo de su corazón era consciente de que no era un ser humano y que aunque animalillo con su mejor voluntad parecía escuchar atentamente su voz , no le entendía.

Así.., que aquella mañana radiante para él fue crucial ; un antes y un después, un autentico flash, un descubrimiento genial..

Sucedió que mientras estaba sentado con las posaderas  ya frías en aquel banco de granito que parecía una tumba , el sol brillante del amanecer reflejado en el agua, iluminó con fuerza su perrita, creando al contraluz una potente y definida sombra del mismo tamaño que ella.


Gafas, juguetona, descubrió sorprendida su propia sombra e incluso intentó olisquearla y tocarla con su patita como si de otro animal se tratara.

En ese preciso momento, Antonio se dio cuenta de algo en lo que nunca había reparado; Se levantó, caminó hasta donde estaba la mascota, y se detuvo de pie bien erguido. Luego, miró hacia su propia sombra y se dio cuenta de que nunca había estado solo, que su sombra con una preciosa forma humana, siempre lo había acompañado a donde quiera que fuera como un silencioso, 
oscuro y discreto ser.

Desde ese día Antonio dejó de sentirse solo. Al principio, solo la miraba. Luego, comenzó a hablar con ella en voz alta y de algún modo sentía que ella le respondía. El solitario hombre, le fue tomando cariño a su sombra y junto a Gafas, sus paseos se fueron haciendo cada vez mas alegres. Su sombra, se fue convirtiendo en una compañera a la que cuidaba. A veces reía con ella cuando el sol raso la agigantaba como un coloso o cuando desde lo alto,con el mediodía, la achaparraba hasta convertirla en un cómico enano de circo. En el ocaso de los días de verano, hacía que el sol poniente la refrescara en el aguade la playa, mientras él desde la orilla, se deleitaba con los cien fragmentos horizontales con que la rompía el oleaje. En otras ocasiones, cuando el sol de mediodía achicharraba, Antonio le daba descanso a su compañera y le permitía dormir fundida con la enorme y fresca sombra de una gigantesca magnolia entre cuyas raíces él se ponía a también a sestear plácidamente.

Está claro que las gentes de aquél barrio, lo tomaron por loco; inofensivo.... , pero loco . Los demás, sin entender nada de lo que sucedía, solo lo veían hablando en voz alta, riendo, y haciendo cosas raras y aunque Antonio era consciente de ello, se sentía tan bien con su sombra que ni por un segundo pensó en volverla a ignorar por el " que dirán " de unas gentes que lo ninguneaban.

Aun recuerdo como supe del caso de Antonio. Estaba yo sentado una tarde de otoño en la terraza del bulevar con el suelo casi invisible por la hojarasca dorada, cuando vi que Antonio en una mesa vecina maniobraba extrañamente tratando de sentarse. Mas tarde, cuando me fui enterando, comprendí que se estaba intentando colocar de modo que su sombra pudiera descansar en una silla cercana.

Luis, el camarero, aunque lo conocía porque era un cliente habitual, acudió a recoger su comanda con esa mezcla de miedo y aprensión que nos dan los pirados a los que nos creemos cuerdos y no pudo evitar detenerse a varios metros y  en voz alta pedírsela de lejos, fingiendo limpiar una mesa.


- ! Don Antonio!..¿ Café con leche como siempre... ?

Antonio notó el gesto y le cabreó la desconfianza y enfadado y de malos modos le dijo al camarero : ! Luis! ! ! Acérquese Vd. y no sea cabrón que no me lo voy a comer!.

Luis, contemporizando le dijo tímidamente mientras se aproximaba a la mesa: !Mire que a veces tiene Vd. mala sombra Don Antonio…!


Antonio, con una mirada de las que matan le respondió : ! Mire Luis! ; lo que yo tengo es mala leche, ! Pero mi sombra…! !Mi sombra…! !! Es cojonuda!!.

Luego, sonrió dulcemente 
como disculpando a Luis mientras miraba a su derecha  hacia a aquella silla vacía donde descansaba su sombra....

sábado, 2 de abril de 2016

EL BOTICARIO DE SANTA BRÍGIDA


Cuando vine a de Santa Brigida de la Torre...no fui consciente hasta pasado algún tiempo de la peculiaridad de sus gentes. Era algo.... que no se podía apreciar a primera vista, hasta que conocías más profundamente el trabado tejido de relaciones personales del lugar y podías ser aceptado como uno mas..., la verdad, es que ser el único boticario estable de la población, me ayudó mucho a ello.

Era muy extraño que en este pueblo, de siempre tirando a conservador y cristiano, se diera ese raro culto al suicidio y tuviera una tasa de mortalidad , por este modo de morir, diez veces superior a otros lugares, El suicidio era para los Brigidanos....., no solo una salida digna, sino incluso honrosa y valiente.


 El modo de "quitarse de en medio", podía ser valorado estética y artísticamente, e incluso....ser considerado hermoso y si su originalidad o motivación eran suficientemente notorios, tener un lugar honroso en la historia y el recuerdo popular, .

Los lugareños pensaban que, de un modo tácito, tenían como una bula directa de Diós que podía saltar los preceptos de la Iglesia a este respecto.

 Al parecer.... , todo se había originado, con la muerte de Santa Brígida (mártir no reconocida por la iglesia), moza virgen visigoda, que prefirió tirarse de la torre del castillo antes que ceder a los deseos libidinosos de Ali-Hasan, el moro invasor, aunque.... algunos guasones lo atribuyen al terrible olor corporal del sarraceno.

Luego...., fue Roderico señor de éstas tierras, él que se tiró con veinte alazanes blancos desde lo alto de la cortada, en protesta por las inclinaciones judaizantes del rey Sancho II "El Suelto".

Fue fruto de tales buenos ejemplos, el que, de siempre, auto inmolarse fuera en Santa Brígida ,extraoficialmente bien visto por la gente, e incluso en algunas épocas, el cementerio de los suicidas casi alcanzara mayor tamaño que el camposanto cristiano .
Para atajar esta nefasta costumbre , Don Genaro, cura oriundo del propio pueblo, fue enviado como párroco por el episcopado a finales del siglo XVIII,  pero estaba tan arraigada..., que tras quince años de predicación infructuosa , reconoció su fracaso.....

¿Qué como lo reconoció?, pues...!! Quitándose la vida !! como no podía ser de otro modo.

 Encontraron su cuerpo al pie del altar, en medio de un charco de sangre, con las venas cortadas con un cristal de la vidriera de la Virgen del Buen Morir ( Patrona " de facto" de pueblo)Ya más recientemente , durante la guerra civil del 36, Dolores " La Tronera" que era a la sazón alcaldesa anarquista del pueblo , se colgó de una higuera envuelta en una bandera de la CNT, cuando su amante "la Bollera" se largó con un representante de boinas.

Respecto a mi.....bueno yo.. yo... estoy tantos años en el pueblo, que me considero uno de ellos..., es mas, ya pienso como ellos.... y os aseguro, que de mí, no se van a olvidar...Ayer supe de la presencia en mis entrañas de una terrible enfermedad.....y no está en mi ánimo sufrir una larga agonía...... He tomado la decisión, de que "lo mío" va a ser sonado...., magistral....., digno de leyenda ...,vamos, Tengo planeado que encuentren mi cadáver, macerado por el alcohol y encadenado al fondo de la gigantesca barrica de vino dulce , que todos los años, a costa del ayuntamiento, vacía con alegría el pueblo entero durante fiestas....

!Ah! y espero que ésta gente en el futuro me recuerde y encuentre mi suicidio de su ...!!"gusto"!!....ja ja ja